viernes, 7 de marzo de 2014

En la cuenta regresiva

Volví.
Pasaron meses. En el medio, el calendario acusa cambio de año, y la realidad agrega cambio de casa y de trabajo. Todojuntoasícomosuena. Fiel a mi estilo podría decir.

Mientras me entusiasmaba con la idea de este post me acordé de los días previos a mi casamiento. Nada de manualidades ni tampoco de limpieza de cutis ni baños de crema. Sumergida entre libros y apuntes, estudiando para recibirme unos días antes de nuestro civil. ¡¿Qué necesidad!? La respuesta se las debo.

Esta casa en miniatura de madera la armaron entre amigos para el casamiento de Diego & Grace. Como viven juntos hace diez años, ni la lista de casamiento tradicional, ni la opción de hacerla online les servían a los novios. Pero la idea de tener que darles a sus invitados el número de cuenta bancaria, tampoco los convencía.

Después de verla en Pinterest se les ocurrió hacer una alcancía que va a estar ubicada en el mismo lugar del festejo y la celebración por civil, que van a ser al aire libre en el jardín de su casa en Escobar.

Este es el resultado.

La ranura está donde el techo de paspartú se divide a dos aguas.
Las paredes, la base, la puerta y las ventanas son de madera recortada a medida y pintada con témpera. Las letras y el cartel fueron escritos a mano sobre cuadraditos de madera recortados.
La decoración de la puerta, en la que se simularon listones de madera que tomaron relieve con el paso de la témpera, fue hecha con un porta servilletas de la dueña de casa.

La casalcancía viene con pileta con trampolín, auto, flores y mascotas. No hay escombros, goteras, alambres ni tachos de pintura alrededor. ¡Pura ficción! pero quedó divina.